martes, 4 de enero de 2011

The Tudors


Sigamos con las series. Hoy toca Los Tudor. Enganchadísima. Bueno, no terminé la primera temporada, pero la acabo de empezar y creo que, si los estudios me lo permiten, la terminaré rápido. 
La primera vez que vi esta serie fue allá por el 2008, y no me gustó NADA. Me explico, todas las series las veo en V.O. y ésta me costaba un montón seguirla, así que la aparqué, pero como siempre mi buena amiga Helen me llevó por el buen camino y le di otra oportunidad, a regañadientes, pero decidí verla doblada, y de esta manera ha conseguido enamorarme. 





Vamos a ver, no tiremos cohetes ni bailemos la danza de los dioses, porque en cuanto a la veracidad histórica deja mucho que desear. A mi lo que mas me llama la atención es el físico de los personajes, factor, que, personalmente, considero importante en una serie histórica. Ja! Vamos,Enrique VIII igual era bello para le época, pero por lo que sabemos de las pinturas era de, "pies, para que os quiero" o por ejemplo, Ana Bolena era muy famosa porque sus ojos eran negros como el tizón, pero bueno, me lo tomo como una adaptación y punto. Prefiero no entrar en romances "bidefeis" o problemas políticos mal documentados.


A ver, la serie tiene muchos fallos, pero aun así, te explica, de manera que consigue enganchar al espectador la vida en la corte, y en menor medida, en el pueblo inglés. Todos los problemas que ha sufrido y como un solo ser humano juega, va y viene con el todo un pueblo, y si me apuras, gran parte de un continente. Traiciones, ambición, avaricia, lujuria... Todo expuesto en una mezcla que te invita a conocer nuestro pasado, a pensar que los tiempos no han cambiado tanto. Que la iglesia mete mano, la monarquía toma decisiones que no les corresponde y que pagamos todos por ambiciones y errores evitables de otros.

Hasta aquí puedo leer, que solo voy por la primera temporada!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Fallos (e invenciones) históricos aparte, lo que sí es cierto es que Catalina era una grande!!!! xD
Hay cosas que tienen que adaptar, es difícil condensar todo lo que pasó durante el reinado de Enrique VIII en cuatro temporadas, pero yo creo que, a pesar de las imprecisiones, transmite muy bien lo importante, y es cómo el destino de un país estaba en manos de los caprichos de un rey.